Andrea Giuntoli, Maestro Heladero y su esposa, Natali Holguin, crearon este particular e increíble emprendimiento que abrió sus puertas en el año 2004. Las personas pueden disfrutar los mejores sorbetes y helados de esta marca en el barrio de L’Eixample, Barcelona.
La calidad, variedad y confianza son los principales valores que definen este particular y único negocio, que ofrece helados de orígenes toscanos por la gran influencia que tuvo Andrea al nacer y criarse en Italia. Entregan helados artesanales con gran calidad, ya que se producen con maestría.
Cremeria Toscana tiene otra peculiaridad, ellos poseen una fábrica propia para crear, analizar y producir sus helados. Además, es el lugar donde Andrea hace la magia: mezcla sus bases de sorbete y de pasteurizada, y cuando estas salen de las mantecadoras, las transforma en los deliciosos helados que brinda la empresa.
“Este aspecto es muy importante, ya que al tener nuestra propia fábrica; Cremería Toscana se diferencia de otros laboratorios de helados”, afirma Andrea. De hecho explica que reciben directamente sus insumos y los transforman con pasión en los mejores productos para su público. Asimismo, no dependen de nadie y pueden cuidar la calidad de sus elaboraciones con mucho detenimiento.
El proceso de manufactura
Se divide en 3 fases. En la primera, el almacén de la empresa recibe las materias primas, como la leche, la fruta, los azúcares, entre otros productos. La segunda etapa corresponde al laboratorio de mezcla, que es el lugar privado de Andrea, nadie puede entrar mientras él hace sus mezclas de las bases. Además, es en ese lugar donde se logra la composición, textura y cremosidad tan especial y secreta que define a los productos de Cremeria Toscana. Una vez formulado el helado, se llena en un saco de 30 kilos y se almacena para la preparación de las siguientes semanas.
La tercera fase consiste en la producción del producto final. Se eligen las frutas, los frutos secos y todos los sabores que se van a ofrecer a la venta. También tuestan y procesan los frutos secos para obtener sus propias pastas. Por lo que en Cremeria Toscana se obtiene un increíble helado de autor, desde el minuto 1 de su creación, hasta el final del proceso.
Por otro lado, utilizan equipos de última tecnología, y Natali adelantó que están en planes de obtener más maquinaria, sobre todo porque la productividad de la empresa es en cantidad de toneladas y tienen la capacidad de expandir su negocio de acuerdo a la demanda que reciban.
La estrategia de La Fábrica dentro de los proyectos de Cremería Toscana está comprometida con muchos propósitos (secretos todavía) para consentir al público. Cuentan con una cámara de refrigeración inmensa que pretenden llenar y con el paso del tiempo aspiran comprar auto refrigerado para hacer repartos sin límites de distancia.
Productos que se hacen con amor y pasión
La Cremería Toscana es una marca llena de tradición, variedad, artesanía y calidad, que se enfoca en impresionar el paladar de sus clientes, cautivar con nuevos sabores o con helados que muy poco se ven en el mercado.
Andrea Giuntoli es el creador de estas obras maestras, elabora a diario sorbetes y helados combinando sabores distintos e ingredientes de máxima calidad y de temporada. Lo que más destaca de esta fábrica es que son helados hechos por el propio dueño de la empresa, utilizando materiales de alta calidad.
Además, cada año o temporada se ofrecen nuevos sabores, tratando siempre de innovar e impresionar a los clientes. Se maneja un catálogo de verano y un catálogo para todo el año, donde se brindan los más exquisitos sabores como por ejemplo; coco, leche merengada, limón, chocolate con menta, cheese cake, higo, lúcuma, mascarpone, tiramisu, queso de cabra con frambuesa, entre otras degustaciones más que Andrea puede crear e imaginar. La novedad de esta temporada es el açaí, fruto de la Amazonia Brasileña.
Giuntoli en su fábrica lo que busca es comodidad, seguridad y sobre todo espacio, su trabajo lo ve como diversión, por eso es que sus helados son los más espectaculares; porque se hacen con amor y pasión. La Fábrica es una empresa familiar y artesanal, al ser artesanos del helado, todo lo hace el dueño innato de su producto, puesto que él propiamente elabora el helado y la mezcla del mismo en particular, por eso el cliente siempre tendrá un producto de primera calidad y sano.
Los productos son 100% naturales y frescos, por eso el helado es totalmente benéfico, además, Andrea está en la capacidad de prometer helados para todos los gustos, como por ejemplo, los helados veganos, los sabores para el verano y los sabores que se entregan todo el año.
El deseo de la pareja es lograr mudarse a una fábrica más grande para realizar nuevos sabores y poder crecer aún más. Por los momentos tienen 4 certificados esperando ser avalados por el registro de sanidad y así tener las licencias faltantes y lograr establecerse en la nueva fábrica, donde, además, podría estar abierta al público para que experimenten sus maravillosas creaciones.
Por otro lado, Cremeria Toscana también divulgó su programa de Reventas y Franquicias en que la persona que desee y cumpla con ciertos requisitos, se convierte en un franquiciado y lleva los sabores de la Cremería Toscana a donde quiera. Las ventajas de ser un aliado de la Cremería Toscana es tener la variedad, logrará ofrecer sabores tradicionales de sucesos y temporadas, algo que es totalmente diferente a las demás heladerías, también conseguirá brindar creaciones exclusivas con temáticas y formatos distintos de envases y tarrinas.
Natali aclara: “la calidad es otra de las ventajas añadidas, puesto que desde La Fábrica se produce el helado base y se envía, solamente el franquiciado deberá seguir unas instrucciones para finalizar la elaboración del helado y tenerlo en la tienda. La atención será totalmente personalizada y siempre contará con el apoyo de La Fábrica antes, durante y después del proceso. Y la confianza es uno de los pilares fundamentales de la alianza que se genere, siempre se cuenta con el apoyo y la ayuda de La Fábrica sede”.
Desde el año 2004 la empresa ha logrado una receptividad maravillosa en el mercado y en el público. La Cremeria Toscana es el amor, tradición y pasión que se demuestra en los helados, tanto en la elaboración como en la presentación de los mismos.
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